¿ATLETA «NO VIDENTE»?

Últimamente se puso de moda decir «atleta no vidente». Incluso yo mismo suelo utilizar estas palabras. ¿Ahora bien… es correcto decirlo así?

Si bien ya fue bastante aceptado por la sociedad, la realidad es que esto es incorrecto. ¿Acaso el que tiene problemas auditivos es NO OYENTE? ¿o las personas mudas son NO HABLADORES? o quienes tienen problemas motrices NO CAMINADORES?

Según lo dispuesto por la Convención Internacional por los Derechos de las Personas con Discapacidad de Naciones Unidas(ONU) se dispuso que el término adecuado para referirnos a las personas que tienen una o más discapacidades es: “Personas con Discapacidad” (PCD) o “Personas en situación de Discapacidad” (PeSD).

En el caso de las personas que no ven se dice “Personas con discapacidad visual”.

INADI (Instituto Nacional contra la discriminacion) publica que la persona con discapacidad visual se denomina CIEGO ya que se deja de lado la nomenclatura que define su carencia. Por eso no es correcto decir “NO VIDENTE”.

Se prioriza al sujeto de derecho, la persona y luego su discapacidad con su nombre, no con la falta de.

• Por eso es Persona con discapacidad visual (no NO VIDENTE)
• Persona con discapacidad auditiva (no NO OYENTE)
• Persona con discapacidad motríz (no NO CAMINANTE)

La Convención sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad tiene fuerza de ley en los países que adhirieron a dicho Tratado.

Las denominaciones correctas fueron formuladas en la Convención con el fin de cambiar el paradigma para que las personas sean valoradas por sus capacidades.

No es mi intencion solidarizarme con la Real Academia española, ni tampoco preocuparme si Cervantes se tira de los pelos, simplemente aproveché la oportunidad para contarles esto.

Ahora bien, ¿cómo es el tema de las clasificaciones cuando corremos? He tenido muchas preguntas y comentarios tales como «¿Ustedes tienen una puntuacion diferente por no ver?», «Hubo uno que hizo trampa porque subió al podio de NO VIDENTES y veía!!!»

Es aquí donde quiero aprovechar para contar las diferentes clasificaciones deportivas que existen dentro de la discapacidad visual. Tenemos 2 grandes clasificaciones, por un lado, las personas ciegas, quienes no vemos nada y por el otro las personas con baja visión o disminuidos visuales, quienes si bien pueden ver algo, es tan poco lo que ven que se los considera personas con discapacidad.

Deportivamente hablando tenemos las categorías B1, B2 y B3. En pocas palabras, B1 corresponde a los ciegos y B2 o B3 se refiere a quienes tienen baja visión y se los diferencia dependiendo del grado dificultad visual (por ejemplo, un B3 podría llegar a correr sin guía, porque puede ver bastante).

¿SE RESPETAN ESTAS CATEGORÍAS EN LA MAYORÍA DE LOS EVENTOS?

No, casi nunca.

Yo he tenido que competir como maratonista, triatleta, ciclista y nadador y lo he hecho tanto aquí en Argentina como en el exterior… muchas de estas competencias de muchísimo renombre y sin embargo, en algunos casos, he tenido que anotarme como un corredor convencional, en la categoría general. En otros casos había una categoría que juntaba a todas las personas con discapacidad independientemente del tipo de discapacidad… en otros eventos se juntaban a todas las personas con discapacidad visual y en otros se separaban a las personas ciegas de las disminuidas visuales.

¿POR QUÉ SUCEDE ESTO?

Cuando alguien lee un certificado de discapacidad, exceptuando quienes nacieron ciegos, es muy difícil darse cuenta si la persona es ciega o disminuida.

En el caso de los atletas paraolímpicos, todos obtienen una correcta clasificación, pues deben ser revisados por el oftalmólogo especializado que responde a la Federación. En mi caso, al haber sido federado, tengo mi carné en donde figura que soy B1, pero la gran mayoría de los corredores con discapacidad visual son amateurs y por lo tanto no tienen esta clasificación. En estos casos, los organizadores no pueden identificar si una persona se está anotando en la categoría que le corresponde o no. En síntesis, personalmente me parece injusto cuando me ponen en la misma categoría que a los disminuidos visuales, pero debo reconocer que si obligaran a federarse a todos, muchos chicos, por diversos motivos, no tienen la posibilidad de hacerlo y se terminarían quedando sin correr. Creo que lo más importante es que todos podamos participar.

Algo que hacen por ejemplo en Uruguay, es obligar a todos a correr con antifaz y de esa forma no hay ventaja deportiva. No es mala idea, pero la verdad que no es muy cómodo… además, con antifaz no salgo tan lindo en las fotos!!!

Por otro lado, es muy diferente como entrena una persona con disminución visual respecto de cómo entrena un ciego. ¿Por qué? En el próximo capítulo les cuento cómo son nuestros entrenamientos

¡Hasta la próxima!

Martin Kremenchuzky
Triatleta y conferencista ciego e hipoacúsico
www.martinkremen.com.ar
kremen@ciudad.com.ar
FB: /ironkremen
IG: @martinkremenchuzky

 

 

 

 

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